"LA HUMANIDAD" nos presenta tres rostros humanos, una primera mujer sumida en profunda tristeza, en el medio un hombre con gesto adusto, duro; y una segunda mujer con la mirada esperanzada hacia lo alto; todos ellos envueltos en encajes, sogas y alambre de púas.
Mi escultura está realizada en arcilla refractaria, dos cocciones, está patinada, y con aplicaciones textiles y metálicas; montada sobre un trozo de tronco de quebracho.